Con Cristiano Ronaldo como testigo, en uno de los lugares destinados a las celebridades, Djokovic superó a Isner, el jugador más alto de la historia en competir en el torneo que cierra la temporada (2,08) en una hora y 13 minutos, un día después de recibir el premio como número uno del mundo a fin de año, empatando con Federer y Jimmy Connors y quedando a uno de los seis récord de Pete Sampras.
Isner, de 33 años, tercer debutante de mayor edad en la historia de este torneo, mostró en el O2 que su saque es el arma definitiva con el que puede destrozar a cualquier adversario, menos a un inspirado Djokovic, que fresco tras alcanzar las semifinales en el Masters 1.000 de París, fue capaz de acallar su cañón, robándolo en tres ocasiones.
El saque del estadounidense marcó un hito este año en Wimbledon cuando logró 214 “aces”, récord del torneo, acumulados en su travesía hasta alcanzar las semifinales, donde cedió contra el surafricano Kevin Anderson, por 26-24 en el quinto set, después de una dura lucha de seis horas y 36 minutos.
Pero este lunes, Isner no pudo intimidar al jugador de Belgrado.Los restos y golpes de derecha de 'Nole' hicieron tambalear al gigante, de Greensboro (Carolina del Norte) que asistió a una gran exhibición de su verdugo, para terminar encajando la novena derrota en 11 enfrentamientos.