La selección de Polonia confirmó otra remontada más en estas finales de copa del mundo de tenis que están dejando eliminatorias de gran igualdad y con el factor sorpresa siempre presente.
Con el 1-1 en el global tras las victorias de Marie Bouzkova, por Chequia, e Iga Swiatek, por Polonia, todo quedó visto para la sentencia del dobles, ya en horario de madrugada, en el último partido de este sábado en la pista anexa al Palacio de los Deportes José María Martín Carpena.
Pese a haber disputado más de dos horas y media de intenso partido ante Linda Noskova en el turno anterior, Iga Swiatek fue elegida para el dobles y no acusó en ningún momento el cansancio físico.
Como decía Paula Badosa en el pospartido de su derrota ante la tenista polaca en octavos, Swiatek está “un punto por encima de todas físicamente”. Para muestra, este desempeño en cuartos con doble ración de partidos.
Junto a Katarzyna Kawa formó una pareja inusual que daba la sensación de estar gestando una química superior a lo esperado, de ahí que volaran en el primer cuarto con un 6-2 sobre Bouzkova y Siniakova, que no vieron venir el vendaval.
En el segundo cuarto hubo un contraataque checo, que igualó la contienda hasta que las polacas volvieron a ver más espacios en pista para seguir colando tiros ganadores y, así, lograr el definitivo 6-4.
Polonia se enfrentará con la vigente subcampeona de la competición, Italia, que eliminó a Japón. Este cruce de semifinales, que tendrá un bonito duelo entre Swiatek (número dos del mundo) y Jasmine Paolini (número cuatro), se disputará el próximo lunes a las 17.00 horas.