Vekic acaba con el sueño de Schmiedlova y luchará por el oro con Zheng

París, 1 ago (EFE).- La croata Donna Vekic acabó con el sueño de la eslovaca Anna Karolina Schmiedlova que, desde el puesto más bajo del ránking, el 67, se situó en las semifinales del torneo olímpico de tenis individual femenino, donde perdió con la balcánica por 6-4 y 6-0.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2059

Vekic, que ya se había impuesto a su adversaria en Luxemburgo, hace seis años, en la única ocasión en la que se enfrentaron hasta ahora, en pista dura, se aseguró la medalla de plata y pujará por el oro en la final que jugará contra la china Qinwen Zheng que eliminó a la principal favorita, la polaca Iga Swiatek en la sesión diurna.

La primera croata de la historia en alcanzar una final olímpica de individual femenino, semifinalista de Wimbledon, acabó con el efecto sorpresa de su rival, que ya queda señalada como la jugadora con peor clasificación en semifinales desde que los juegos volvieron al programa olímpico en 1988.

La croata, finalista recientemente en Bad Homburg, se hizo fuerte desde el principio y tras apuntarse el primer parcial aceleró, aprovechó el bajón y el desencanto de su rival y logró el triunfo en 67 minutos.

Fue una decepción para la eslovaca que antes de esta semana en París había jugado más de 700 partidos en su carrera y solo había logrado una victoria ante una tenista del Top 10: sobre Roberta Vinci en los Juegos Olímpicos de 2016 en Río de Janeiro.

Ahora, la tenista eslovaca de 29 años, que no figuraba como cabeza de serie, pujará por el bronce. Se enfrentará a la número uno del mundo, la polaca Iga Swiatek sorprendentemente superada por la china Qinwen Zheng en la otra semifinal.

La pupila del español Pere Riba ganó por fin a la polaca (6-2 y 7-5) y luchará por la medalla de oro del torneo individual femenino. En los seis duelos anteriores, la jugadora oriental, séptima del mundo, no había podido imponerse nunca a la jugadora europea, ganadora de cinco Grand Slam, cuatro de ellos en Roland Garros, donde había acumulado veintiséis victorias seguidas.

Zheng, erigida ya en el primer jugador chino, hombre o mujer, en llegar a una final olímpica de tenis, en cualquier modalidad, no acusó el esfuerzo de las jornadas anteriores. Más de tres horas contra la estadounidense Emma Navarro y otras tantas el miércoles frente la alemana Angeique Kerber. En esta ocasión solo necesitó dos sets y una hora y 51 minutos

Tampoco afectaron a la pupila de Riba las seis derrotas encajadas antes contra la polaca. Los últimos encuentros entre ambas ya habían delatado una mejoría de Zheng en los cara a cara. Había logrado sets.

Su arranque fue arrollador y tras cuatro parciales de equilibrio aceleró para lograr la primera manga. Después, reaccionó con determinación la campeona de Roland Garros y se puso 4-0 pero Zheng fue punto a punto e igualó la manga. El partido se le iba a Swiatek, precipitada e insegura. Excesivamente fallona. Dos errores suyos, dos tiros largos que se marcharon fuera, sentenciaron el triunfo de Zheng, finalista también este año del Abierto de Australia que perdió ante Aryna Sabalenka, que jugará por el oro contra la ganadora del partido entre la eslovaca Anna Karolina Schmiedlova y la croata Donna Vekic.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...