No tuvo en cuenta ni la organización ni el propio Carlos una posible prórroga, la que forzó Florian Wirtz en el minuto 88. Por eso, en cuanto Anthony Taylor señaló el final de los noventa minutos reglamentarios, la megafonía de la sala de prensa retumbó con un "La rueda de prensa de Carlos Alcaraz ha sido pospuesta treinta minutos".
Entre las risas, por la obviedad del motivo, un periodista apuntó: "Que digan directamente que no va hablar hasta que acabe el partido de España".
Minutos antes, Alcaraz abandonaba la pista central después de que la entrevistadora a pie de cancha, Annabel Croft le preguntara por el partido. "No sé el resultado, ¿cómo van?", dijo el español, a la par que Croft buscaba ayuda en la grada. "En cuando salga me voy a verlo", agregó Alcaraz, que confirmó a los periodistas que lo de que jugara a las 13:30, en el primer turno de la pista central, fue casualidad.
Hace dos semanas, en Queen's, sí pidió a la organización jugar pronto para no perderse el segundo partido de España en la fase de grupos e incluso llegó a contar que si se solapaba su partido contra Jack Draper con la Selección, se plantearía preguntar el resultado en los descansos.
"No he pedido jugar antes, porque Wimbledon es Wimbledon, pero estaba muy contento con que me haya tocado en el primer turno".
Nada más salir de la pista, Alcaraz no faltó a su cita con la firma de autógrafos y de ahí se marchó directo a la bicicleta estática, para no pasar de la tensión del partido a la relajación absoluta.
"He llegado cuando estaba a punto de terminar la primera parte", explicó el español. "Luego he tenido que hacer baños fríos, con contraste de agua fría y agua caliente, y ahí estaba con el teléfono viendo a España en la ducha".
Al ser insistido sobre si mete el teléfono en la ducha, Alcaraz se ríe: "En la ducha el agua me llega a las piernas y estaba ahí con el teléfono, pero es que no me podía perder a España".
"Me he duchado rápido para verlo en el vestuario. Los últimos diez minutos del partido y ya toda la prórroga. Ahí hemos estado sufriendo y animando a España todo lo que hemos podido", afirmó Alcaraz, que llegó exultante a la rueda de prensa.
Tras el tenso final, con los seis minutos de añadido que Taylor se sacó de la manga, la megafonía de Wimbledon no tardó ni treinta segundos en pronunciar las siguientes palabras: "Carlos Alcaraz está de camino a rueda de prensa".
Después de eliminar a Tiafoe, la prioridad era ver a España. Día redondo para Alcaraz.