Jabeur, que era la primera semifinalista africana del US Open, se impuso a Garcia por 6-1 y 6-3 en apenas 66 minutos de juego sobre la pista central de Flushing Meadows (Nueva York).
Tras caer ante la kazaja Elena Rybakina en julio en Wimbledon, Jabeur tendrá el sábado una segunda oportunidad de alcanzar su primer título de Grand Slam.
“Se siente increíble. Después de Wimbledon había mucha presión sobre mí y he cumplido con los resultados”, se felicitó.
Jabeur, de 28 años al igual que Garcia, enfrentará en la final a la polaca Iga Swiatek, la número uno mundial, o la bielorrusa Aryna Sabalenka.
“Espero que su partido dure cinco horas” , deseó. “Son muy buenas jugadoras pero una final no es sobre tenis, es sobre ganar”.
Jabeur tuvo un inicio fulminante de partido ante una desdibujada Garcia, que pagó el peso de jugar sus primeras semifinales de Grand Slam y las primeras del tenis femenino francés desde Marion Bartoli en 2013 en Wimbledon.
La francesa, campeona en agosto del WTA 1000 de Cincinnati y con una racha de 13 victorias seguidas, se vio rápidamente sobrepasada por el demoledor tenis de Jabeur, que conectó 8 aces y 21 golpes ganadores, por 2 y 12 de su rival.
Garcia entregó el primer set en apenas 23 minutos, sufriendo tres rupturas de servicio. En el segundo elevó la intensidad pero nunca llegó a poner en riesgo de Jabeur y se fue sin tener una sola pelota de quiebre.
Primera finalista africana en Nueva York
A partir de su feroz servicio (6 aces en el primer set), Jabeur frenó en seco a una Garcia que estaba confirmando en Flushing Meadows su resurrección deportiva de los últimos meses, que la devolverá al top-10 de la ATP por primera vez desde 2018.
Tras llegar como una flecha a los octavos de final, Garcia arrasó el martes a la nueva joya del tenis femenino, la estadounidense Coco Gauff, para decepción de los 23.800 aficionados de la pista central, la mayor del mundo.
También despachó a la australiana Ajla Tomljanovic, la verdugo de Serena Williams la semana pasada, pero este jueves se estrelló ante una Jabeur que conocía los caminos para ganarle.
La tunecina, número cinco del ranking mundial, ya se había impuesto a la francesa en sus dos enfrentamientos como profesionales y también en otros cuatro duelos en el circuito junior entre 2010 y 2011.
“Esas victorias ayudan. Yo sabía que ella estaba jugando un tenis increíble y que pondría presión. Mentalmente estaba muy lista”, afirmó Jabeur.
Jabeur demostró que está hambrienta por conquistar su primer título de Grand Slam y seguir siendo una pionera del tenis de su continente.
La tunecina, que en Wimbledon fue la primera finalista africana de Grand Slam, lo es ahora también en las 141 ediciones del Abierto de Estados Unidos.
Entre los agradecimientos, Jabeur señaló a la ex tenista española Arantxa Sánchez-Vicario, ganadora de este torneo en 1994, que volvió a animarla desde su palco.
“Es una gran amiga y siempre esta ahí para mí”, agradeció.