Ruud, número siete del ranking mundial, batió a Berrettini (14º) por 6-1, 6-4 y 7-6 (7/4) en el primer choque de cuartos en la pista central de Flushing Meadows (Nueva York).
El noruego, subcampeón del pasado Roland Garros, realizó una de sus mejores actuaciones en pista dura y aprovechó los errores del desdibujado Berrettini, al que barrió en los dos primeros sets y remontó una desventaja de 2-5 en el tercero.
“Fue el mejor inicio que nunca he tenido en un partido, todo iba en mi favor. Matteo sirvió muy bien, como siempre, y yo tuve que aprovechar mis oportunidades”, se felicitó Ruud.
Al noruego, sus primeras semifinales del US Open podrían depararle otro duelo de alto voltaje ante Nick Kyrgios si el australiano es capaz de batir en la tarde al ruso Karen Khachanov.
La disputa entre Kyrgios y Ruud se remonta a 2019, cuando el australiano fue expulsado del enfrentamiento que sostenían en el Masters de Roma.
Kyrgios fue sancionado con un juego por insultar a un juez de línea y arrojó furioso una silla a la pista antes de agarrar la mochila y abandonar la pista.
Más tarde se le impuso una multa de 20.000 euros y se le restaron puntos en el ranking.
Ruud pidió que Kyrgios fuera expulsado del circuito durante seis meses y calificó su comportamiento de “idiota”, a lo que el australiano le respondió en un mensaje en que tildó su juego de “aburrido”.
Este martes, Ruud estuvo fabuloso en la devolución frente a Berrettini, dueño de uno de los mejores servicios del circuito.
El noruego quebró cinco veces al italiano y solo le permitió siete aces y un 68% de los puntos ganados con su primer saque.
Ruud voló en los dos primeros sets bajo la cubierta de la pista Arthur Ashe, desplegada por la lluvia que acompaña la jornada en Flushing Meadows.
Berrettini, subcampeón de Wimbledon, apenas logró contener la avalancha con quiebre en el inicio del tercer set.
El italiano llegó a estar por delante 2-5 y tuvo tres pelotas de set que Ruud contuvo para sellar el triunfo por la vía rápida en el tiebreak.
En Nueva York, Ruud aspira a alzar su primer título de Grand Slam, pero también tiene opciones de convertirse en el primer noruego en llegar al número uno mundial.
Ruud logrará esa meta si alza el trofeo el domingo o si llega a la final y no lo hace el español Carlos Alcaraz.