Garín debía de haber abierto la jornada en la pista uno del All England Club frente a todo un Berrettini, que llegaba a Londres como uno de los máximos aspirantes al título y que fue finalista el año pasado.
Sin embargo, a última hora, un mensaje en sus redes sociales del italiano informaba por sorpresa de que había contraído covid y que, a pesar de síntomas leves, decidía retirarse del torneo.
Eso allanó el camino para el chileno, quien pasó a enfrentarse a Ymer, 137 del mundo y con una derrota en 2015 como único balance en Wimbledon.
En un partido sin excesiva historia, el 43 del circuito impuso su mejor tenis frente a Ymer y mantiene vivo el sueño de repetir su actuación del año pasado, cuando alcanzó la segunda semana de Wimbledon, para acabar cediendo en los octavos.
En la siguiente ronda a Garín le espera otro "lucky loser", el francés Hugo Grenier, a quien nunca se ha enfrentado previamente.