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Ashley Barty conquistó nuevamente el WTA 1.000 de Miami (el primero fue en 2019), pero esta vez con una victoria parcial y el abandono de Bianca Andreescu, quien sufrió una lesión cuando el partido estaba 6-3 y 4-0 a favor de la australiana en 58 minutos de lance. La canadiense solicitó una asistencia médica con 3-0 en contra en el segundo set, fue atendida por un esguince en el tobillo derecho y solo pudo continuar por un juego más.
Barty, quien días atrás aseguró la permanencia en el primer puesto del ranking femenino por la prematura eliminación de Naomi Osaka, manejó el duelo a placer. La jugadora de 24 años logró una ventaja notable en el primer parcial (3-0) que conservó hasta cerrar la manga. Después Andreescu bajó, especialmente el golpe en el tobillo, cuando el choque quedó sin historia.
En este 2021, la nacida en Ipswich añade el certamen de Miami al triunfo en Melbourne y agranda el historial en el que acumula diez títulos individuales, entre ellos Roland Garros y las Finales WTA en 2019. Por su parte, Andreescu, quien eliminó a la griega Maria Sakkari y las españolas Sara Sorribes y Garbiñe Muguruza, quedó a puertas de obtener el primer trofeo del curso. En el curso anterior, la tenista sufrió una lesión de rodilla y permaneció fuera de las canchas por un año.