Ramón "Tati" Zubizarreta: Un distribuidor veloz e inteligente

Con apenas once años de edad y "obligado por amigos y hermanos" empezaba una carrera deportiva del cual no gustaba: el básquetbol, "porque el fútbol era mi atracción desde pequeño y quería atajar en el Olimpia", recuerda Ramón "Tati" Zubizarreta, nuestro entrevistado en esta oportunidad.

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Es que estar mezclado con figuras como Crispín Verza, Tito Correa, entre otros, era un imán muy fuerte en esos años. A pesar de esas exigencias un año entero estuvo en el difícil puesto, en ese enorme arco de 7,32 m por 2,44 m de altura. "Me saqué el gusto", afirma. Pero el destino le tenía preparado otra enorme oportunidad y siguió en el básquet y solo le quedaba acudir a los partidos de su querido Olimpia a ver a esas grandes estrellas que alguna vez fueron sus compañeros en esa infantil.


LOS ÉXITOS DE "TATI" EN EL BÁSQUETBOL

El fútbol quedaba atrás y continuaba la práctica basquetera. Dándole la oportunidad de empezar a gustarle la misma. "Gracias a ello pude conseguir muchas cosas y me lancé de lleno a ellas. Tendría más tiempo y no descuidaría mi estudio", puntualiza.

Lo mismo llegaron los títulos indiscutibles de la franja negra en esos años, con esos inolvidables encuentros jugados en el mítico y recordado Estadio Comuneros, en donde el deporte guaraní gozó de circunstancias agradables en el deporte. Sea básquetbol, boxeo o la llegada de algún circo extranjero de real categoría, o de festivales musicales. ¡Qué hermosos años, aquellos!. Y "Tati" lo vivió y hoy revive esos recuerdos del Comuneros, en esta página, junto a nosotros.

Y con el Olimpia y las selecciones nacionales, cumplió un ciclo interesante en su carrera deportiva, y continúa, ya en otra esfera y en una instancia no muy fácil, la de ser dirigente, y bueno, entusiasta y gustoso de servir al deporte.


EL ADIÓS PARA CONTINÚAR EN LO QUE LE GUSTA

Una vez alejado de esos años jóvenes lleno de vitalidad y energía, en 1978 le dice adiós al baloncesto, para ocuparse de importantes cargos dirigenciales, dedicándose a lo que le gusta: El deporte. Los éxitos en básquetbol queda atrás, con los títulos ganados con el Olimpia, los sudamericanos concurridos y el haber jugado un año en lo que más quería, en el arco, dejando de lado a ese fenómeno llamado "Chiquito" Benítez, en aquella infantil que le tocó jugar. Los juegos universitarios, campeonando con Derecho y los recuerdos del Colegio San José se amontonan hoy bruscamente para rememorar y conformar una rica historia deportiva, a la que se une con esa actualidad, que continúa como una cadena deportiva, ya a nivel dirigencial, siendo actualmente el presidente del Comité Olímpico Paraguayo, llegando a ocupar otros cargos internacionales interesantes, porque tiene mérito y calidad deportiva.
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