“Me robaron mi iPad, a otros la ropa de cama, también desapareció alguna ropas personales”, declaró a la televisión pública danesa DR el jefe de la delegación de este país nórdico, Morten Rodtwitt.
Las presiones de la delegación danesa a la organización para solucionar deficiencias en su residencia provocaron un aumento del flujo de personal de limpieza y de reparación en la villa, y fue entonces cuando se produjeron los robos, aseguró Rodtwitt, quien añadió que el caso de Dinamarca no era el único.
Rodtwitt matizó sin embargo que tras el refuerzo de la seguridad ordenado por la organización no se habían producido nuevos incidentes. “Río 2016 registra ahora a todos los trabajadores que salen de las distintas dependencias, así están seguros de que no han robado nada”, explicó.