Fue un duelo vibrante, con arranque fallido de la connacional que ganó el primer "game" y perdió los seis siguientes, perdiendo por primera vez un set en el certamen.

Posteriormente, se produjo la reacción de Cepede, para ganar el segundo set y estimar el “match” al tercero, en el que estando 4-4 el marcador, la competidora guaraní tuvo dos oportunidades de quiebre que no las pudo aprovechar. Tanta fue su bronca al final que terminó rompiendo su raqueta.

Fue la segunda final perdida en tenis. En la primera, Cepede y Montserrat González habían caído en dobles contra la dupla venezolana Adriana Pérez-Andrea Gámiz.