Al igual que hizo veinticuatro horas antes, cuando se impuso con autoridad en los 3.000 metros, Ingebrigtsen no quiso dejar nada al azar y realizó una carrera muy seria y muy táctica en la que pasado el ecuador del recorrido tomó la delantera, se puso primera y llevó el ritmo que le convino hasta el final.
Ingebrigtsen paró el crono en 3:38.79, seguido del británico Neil Gourley, segundo con 3:39.07, y el estadounidense Luke Houser, tercero con 3:39.17.
El noruego, que hace dos semanas en Apeldoorn (Países Bajos) realizó una gesta histórica al ser el primer atleta europeo en conseguir tres veces consecutivas el doblete continental en 1.500 y 3.000 bajo techo, se marcha de China con dos oros mundiales y amplía un palmarés que incluye dos oros olímpicos en Tokio 2020 (1.500) y París 2024 (5.000), otros dos mundiales al aire libre en 5.000 (Eugene 2022 y Budapest 2023), seis europeos al aire libre y tres continentales de cross.
