Tras ocho mangas disputadas en el campo de regatas de Puerto de Barcelona, los dos equipos prosiguen en su objetivo de ser los primeros en alcanzar los siete triunfos, lo que les permitirá desafiar en la final de la 37ª Copa del América, al Emirates Team New Zealand, defensor del título.
El viento del Suroeste (Garbí) se ha mantenido en 18-20 nudos (34 a 38 km/h), llegando a rachas de 22 nudos (42 km/h) con dos mangas de 8 tramos de 1,8 millas náuticas (3,3 km) para un recorrido total de 26,4 km cada una y oleaje de 50 a 70 cms.
La primera manga, después de una salida igualada, empezó con un pulso entre ambos equipos, con seis cambios de líder en el primer tramo y con una ligera ventaja del INEOS Britannia, solo un segundo, sobre el Luna Rossa con Francesco Bruni y Jimmy Spithill apurando al máximo la velocidad.
Pero cuando apenas se llevaban 7 minutos de regata, el Luna Rossa realizaba una maniobra extraña después de virar la primera boya y 'clavaba' la proa con un fuerte impacto que afectó al carro de la vela de proa, que perdió una de sus protecciones y resultó dañado.
Mientras, el INEOS Britannia, con Sir Ben Ainslie y Dylan Fletcher-Scott como timoneles, seguía el recorrido a la espera de que los italianos anunciaran su abandono.
Finalmente, el Luna Rossa se retiraba para que su lancha de apoyo pudiera acercarse al AC75 transalpino y empezar con la reparación. Sin duda alguna, el 'Silver Bullet' (Bala de Plata) es uno de los AC75 más rápidos de esta edición, pero su fragilidad (innovaciones llevadas al extremo) en varios sistemas es su punto débil y más cuando se superan los 50 nudos (90 km/h) de velocidad.
Así, el INEOS Britannia se avanzaba en la final (4-3) y la octava manga podía ser decisiva para abrir por fin una brecha entre ambos equipos.
No obstante, al iniciarse la presalida de la segunda regata del día llegaba el 'regalo' del INEOS Britannia, que se fue al 'boundary' (línea del límite del campo de regatas) del lado izquierdo y no viro a tiempo, recibiendo una penalización.
El Luna Rossa aprovechó el momento, salió rápido, y cuando los ingleses cumplieron la penalización (debe dejar 75 metros de ventaja a su rival), la diferencia total era ya de 125 metros. Y a una tripulación experta como la que lideran Bruni y Spithill, darle esta ventaja resulta letal.
Los italianos pasaban la boya del final del primer tramo con 12 segundos de ventaja y aumentaba a 270 metros su diferencia, pero la reacción del INEOs lograba recortar al final del segundo tramo (solo 8 segundos).
El viento subía a 20 nudos (38 km/h) y el Luna Rossa salía de los pasos de boya para encarar los tramos con viento a favor a 55,1 nudos (102,1 km/h), cerca del récord que él mismo ostenta (55,3 nudos).
El INEOS buscaba responder y recortaba distancias hasta solo 60 metros. Curiosamente los británicos parecían más rápidos en los tramos con viento a favor, pero el Luna Rossa cuando toma la delantera es, en esta final, prácticamente inalcanzable y se imponía por 16 segundos tras 26'32" de batalla.
Este miércoles, 2 de octubre, a partir de las 14:00 horas se disputarán la novena y décima manga del Torneo de Desafiantes, que sigue más igualado que nunca.