"Llevo años intentando explicar que algunas tesis llevadas al extremo corren el riesgo de impactar especialmente en los derechos de las mujeres", agregó Meloni, según declaraciones difundidas por la prensa local.
El Gobierno italiano ahondó este jueves en sus críticas tras lo acontecido en el combate, tras mostrar este miércoles su "gran preocupación" por la admisión en competición olímpica de boxeo femenino de "dos transexuales, hombres que se identifican como mujeres y que, en cambio, en las últimas competiciones habían sido excluidos".
El ministro de Transporte, Matteo Salvini, líder del partido ultraderechista Liga y socio de coalición de Meloni, aseguró que escribió hoy a la púgil Ángela Carini para mostrar su solidaridad, y denunció que la situación en la que se encontró "no era un escenario olímpico".
"Es verdad que lo importante en los Juegos Olímpicos es participar, pero en igualdad de condiciones", agregó.
La argenlina Khelif había sido descalificada de los Mundiales de Boxeo de 2023 por no haber superado un test de género, que determinó que tenía "ventajas competitivas sobre otras competidores femeninas".
El test fue realizado por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), que no organiza la competición de boxeo en la cita olímpica de París al ser suspendida previamente por el Comité Olímpico Internacional (COI) por irregularidades financieras y en el arbitraje de las peleas.
La entidad reguladora del boxeo en los Juegos Olímpicos fue Boxing Task Force (BTF), creada por el COI, que sí permitió competir en París 2024 tanto a Imane Khelif como a la taiwanesa Lin Yu-ting.
En los combates de octavos de este jueves en los Juegos en la categoría de 66 kilogramos, este duró solo 46 segundos, el tiempo que aguantó la boxeadora italiana Ángela Carin antes de retirarse con claros síntomas de dolor tras recibir dos golpes de Khelif.