Hungría se queda sin oro

Redacción deportes, 17 jun (EFE).- El equipo húngaro, sin lugar a dudas el conjunto más fuerte de los Europeos de Belgrado, que ha quedado algo descafeinados por las numerosas e importantes bajas, saldó sorprendentemente sin ninguna medalla de oro la primera jornada de competición, pese a partir como el claro favorito en las tres finales disputadas este lunes en la capital serbia.

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Pero ni Balazs Hollo, que afrontó con el mejor tiempo de todos los participantes la final de los 400 estilos, ni los equipos femenino y masculino de relevos 4x200 libre cumplieron con los pronósticos.

La ausencia del gran especialista europeo y mundial, el francés Leon Marchand, que a esa misma hora sellaba su primer billete para los Juegos de París tras imponerse en la final de los 400 estilos de los Campeonatos de Francia con un tiempo de 4:10.62 minutos, abría las puertas al triunfo de los representantes húngaros.

De hecho, parecía que Hollo y su compatriota Gabor Zombori, segundo mejor crono en las series matinales, estaban destinados a ocupar las dos primeras plazas del podio en la prueba larga de estilos.

Unos pronósticos que parecían cumplirse cuando a la conclusión de la posta de mariposa los dos representantes magiares lideraban la prueba con una ventaja de más de medio segundo sobre el griego Apostolos Papastamos.

Diferencia que quedó en nada con la llegada de la espalda, uno de los puntos fuerte del nadador heleno, que pasó a ocupar la primera plaza, que Papastamos consolidó con una sensacional posta de braza que situó al griego con una ventaja de 2.61 segundos sobre Zombori y de 3.09 sobre Hollo.

Esa distancia permitió, pese a la reacción final de los dos nadadores húngaros, a Apostolos Papastamos coronarse nuevo campeón de Europa de los 400 estilos con un crono de 4:10.83 minutos.

Casi siete décimas menos que Balazs Hollo, que finalmente se colgó la plata con un tiempo de 4:11.51, y casi nueve menos que Gabor Zombori, bronce con un registro de 4:11.70 minutos.

Gorbenko y Rapsys amargan la tarde a Hungría

Tampoco pudo subir a lo más alto del podio el conjunto magiar en la final femenina del relevo 4x200 libre, a la que las húngaras llegaban con el mejor registro -8:03.82- tras las preliminares de la mañana.

Pero sin la presencia de la veterana Zsuzsanna Jakabos, que hizo historia en las preliminares al disputar en Belgrado su undécimo Europeo consecutivo, veinte años después de debutar en 2004 en Madrid, no pudo responder a la actuación del equipo israelí.

Liderado por Anastasia Gorbenko, vigente subcampeona del mundo de los 400 estilos, el cuarteto hebreo tomo desde la primera posta una clara ventaja que, pese al empeño final de Nikolett Paddar, Hungría ya no pudo remontar.

Tal y como reflejó la diferencia de 1.09 segundos por la que Israel, que se colgó el oro con una marca de 7:51.83 minutos, aventajó al equipo magiar, que se debió conformar con la medalla de plata por delante de Turquía, bronce con un tiempo de 8:01.58.

Si la primera posta de Gorbenko fue decisiva para la derrota en la prueba femenina, en la masculina fue el lituano Danas Rapsys, vigente subcampeón del mundo de los 200 libre, el culpable de dejar a Hungría sin el oro.

Rapsys, que saltó a la piscina en cuarta posición con 1.31 segundos de desventaja con el húngaro Hubert Kos, antes de cubrir sus primeros cien metros ya ocupaba una primera posición que no abandonaría ya para dar el oro a Lituania con un registro de 7:08.04 minutos.

Más de un segundo menos que Hungría, que no pudo revalidar el oro que logró hace dos años en Roma y fue plata con un crono de 7:09.59, mientras que el bronce fue para Grecia con un tiempo de 7:09.73 minutos

Marchand se asegura su primer billete olímpico.

Marcas y resultados que llevaron a concitar la atención a lo que ocurría en los Campeonatos de Francia que se disputan en Chartres, donde Leon Marchand, el nadador que parece destinado a convertirse en la gran estrella de los próximos Juegos Olímpicos de París, buscaba su primer billete para la cita olímpica.

Un pasaporte que Marchand, doble campeón del mundo y vigente plusmarquista universal de 400 estilos, tras batir en 2023 en Fukuoka el legendario récord del mundo de Michael Phelps con un tiempo de 4:02.50 minutos, logró sin apuros tras imponerse en la final con registro de 4:10.62.

Una marca que no dejó satisfecho al nadador francés, que en las series matinales había nadado en un tiempo de 4:14.88 minutos, pero suficiente para rebajar de sobra la mínima -4:12.50- requerida para participar en los Juegos Olímpicos de París.

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