"El día empezó con muchas interrupciones y no sabíamos qué hacer, pero cuando echamos a andar todo fue bien. La escapada se fue y fue buena para nosotros, que nos pudimos relajar", explicó la maglia rosa en meta.
Pogacar comentó el trabajo de Movistar en el penúltimo puerto y sobre todo el de su compañeo polaco Rafal Majka.
"Pero Movistar tiró del grupo y mantuvo la escapada cerca, después fueron muy rápidos en la penúltima subida. En los últimos 2 km intentamos controlar, hasta que Majka se apartó y quedé al frente para hacer algunas diferencias", explicó.
Pogacar dedicó unas palabras al joven italiano que terminó segundo ese día, Giulio Pellizzari, superado por el líder a 700 metros de la llegada.
"Estaba pensando que Pellizzari ganaría la etapa, y estuvo cerca de conseguirlo. Estoy súper feliz de que haya llegado segundo. Sé que me admira, y me envió una foto que tomamos en 2019. En realidad, yo también era un niño pequeño y él también. Fue un recuerdo increíble de la Strade Bianche y ahora él está aquí. Va muy fuerte y tal vez pueda ganar una etapa esta semana", concluyó.