"No esperaba ganar, pero como equipo rodamos muy bien desde el principio. Llegamos a la última subida con una buena ventaja". Rafal Majka hizo un gran trabajo en la salida. Es increíble volver a ganar aquí en Prati di Tivo. Tan pronto como sobrevivimos a la primera subida larga categorizada, mis compañeros de equipo querían que ganara la etapa", comentó Pogacar.
En la subida final el UAE tomó el mando de las operaciones en espera de que Pogacar decidiera el momento del ataque ganador, pero en esta ocasión la maglia rosa no ganó por K.O, como es habitual, sino con un ataque a 150 metros de meta.
"En la última subida, cuando vi que Félix Grossschartner y Rafal todavía estaban bien, tuve confianza en que podía ganar. Ya vimos a Dani Martínez haciendo muy buenos resultados este año, obviamente estaba pensando en él como mi principal oponente, pero no fue el único. Antonio Tiberi lo intentó varias veces, pero lo tenía más o menos bajo control", explicó.
Antes de la jornada de descanso del lunes, Pogacar espera este domingo una etapa más relajada.
"Espero que mañana sea un día relajante, pero los últimos 50 km son complicados, así que tendré que concentrarme. Llegamos a Nápoles y después tendremos un día de descanso", concluyó.