En caso de victoria en el Stade de France, los ‘Bleus’, 2º en la clasificación antes de esta última jornada -Irlanda e Italia disputarán previamente su duelo de la penúltima fecha-, deberían jugarse el triunfo final en el Torneo con Inglaterra, que chocará con Italia unas horas antes en Roma.
Los irlandeses, 4º en la tabla pero con un partido menos, tendrán también algo que decir, ya que una victoria con bonificación ante los italianos el 24 de octubre en Dublín les pondría en cabeza antes del desenlace final. Las selecciones participantes en el Seis Naciones siguen además a la espera de la oficialización de un torneo inédito.
Esta competición, de 4 jornadas entre mediados de noviembre y principios de diciembre, contaría con la participación de estas seis naciones y de dos selecciones invitadas (probablemente Fiyi y Japón, con posibilidades también para Georgia) gracias a una ventana internacional doblada a finales de julio por World Rugby -federación internacional de este deporte- para compensar las giras de verano canceladas y sacar a flote las cuentas de las federaciones, golpeadas duramente por la crisis sanitaria.