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El Gremio argumenta que está conformado por alrededor de 2.000 gimnasios en el país que dan trabajo a al menos 20.000 personas. Todas estos negocios cerraron sus puertas el 11 de marzo y desde entonces no han percibido ingresos, por lo cual no pueden pagar a su personal.
El pedido es que el Ministerio les brinde un protocolo sanitario que puedan aplicar con rigurosidad para reabrir sus puertas “tal como lo aplican otros comercios, hoy en actividad”, apunta el comunicado.
El Gremio además alega que “el ejercicio mejora el funcionamiento del sistema inmunológico, libera el estrés, te aleja de los vicios, regula la presión arterial, oxigena la sangre, y muchos beneficios mas”.
El mensaje cierra recordando que no están pidiendo subsidios del Gobierno pero si que se busque un mecanismo que les permita volver a trabajar.