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Como pasa siempre; los primeros en partir, reciben las facturas de tiempo en contra con atrasos que les cuesta la etapa y quienes parten desde atrás especulan con estrategias que le den la opción de aprovechar la ubicación y descontar lo perdido en la etapa anterior.
Esto ha determinado cambios relevantes en la general de Motos para que aparezca en lo más alto el argentino Kevin Benavides, quien arremete a partir de ahora en busca del título.
En esta oportunidad, el triunfo en la Etapa 10 fue para el botsuano Ross Branch, demostrando que su primera victoria no fue casualidad, sin embargo, quien más ganó ayer fue Kevin Benavides, que a pesar de ser cuarto en la etapa a un minuto de Branch, le sirvió para llegar a la cabeza y comenzar a transitar otra carrera para defender en lo que queda, su posición de vanguardia.
No obstante, lo que pudiera parecer una leve ventaja de Benavides sobre Skyler Howes, hoy puede convertirse en una desventaja por el hecho de que el americano ayer ha hecho una etapa tranquila para atacar desde atrás en una etapa más larga y así descontar, transitando ya el temible “Empty Quarter” o cuarto vacío.
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Las estrategias en las etapas de definición estarán siempre ajustadas y una muestra de ella la vimos ayer con la levantada de Howes y la aparición de pilotos sin chances en el podio, donde lo exceptuamos a Adrien Van Beveren, que todavía tiene algunas posibilidades matemáticas de acercarse.
Más atrás esta Toby Price, que ayer acabó incluso más atrás que Howes y recordemos que está a solo 2m 10s detrás del líder de la carrera.
De todas maneras, hay que entender que el cuarto lugar en la ruta hoy del argentino no es mala idea, ya que desde esa posición tendrá otra perspectiva para defender su liderato en la primera parte de la etapa maratón.
Loeb va con todo
Sébastien Loeb se tira con todo en la última parte de la prueba y abre el “cuarto vacío” con la esperanza de que algo pase adelante.
El brasileño Lucas Moraes se defiende como puede y Nasser Al-Attiyah se sostiene sobre la ventaja de la primera semana, aunque siempre trata de estar absolutamente enfocado en la carrera.
En la etapa de ayer de Haradh a Shaybah de 114 kilómetros de especial, el francés no ocultó su satisfacción de haber hecho una carrera impecable sin errores y admitió que a su navegación le sumo la ayuda de las huellas de las motos que siempre son bienvenidas a la hora del máximo ataque con todos los sentidos arriba de la pista. Todavía hay bastante camino hacia el final y se comenta que la navegación es un fuerte del francés que no oculta su entusiasmo por dar el golpe al final, aunque deberá esperar un milagro para que el catarí cometa algún error o Alá se olvide él.
Pero en perspectiva, primero habrá que mirar lo que Loeb espera a muy corto plazo, y es seguir recortando a Moraes que ayer perdió más de cinco minutos, y el nueve veces campeón mundial de rallies se acerca sin disimulos. En realidad el brasileño perdió consistencia en la última parte de la etapa, al parecer con algún malestar que impidió que esté al cien por ciento con su Toyota Hilux.
La etapa maratón de hoy será determinante en la ultima parte de la carrera y eso lo saben los pilotos de punta, en el caso del catarí, especular con sus diferencias, y del brasileño, sostener su gran trabajo hasta acá a base de concentración y de no cometer errores que le puedan costar la mecánica en la etapa maratón, en la que no tendrá asistencia.
Al cierre de la etapa, Al- Attiyah admitió que no arriesgó absolutamente nada en ningún momento y coincidió que las dos etapas que vienen serán determinantes en el resultado final. “..No cometimos errores y tenemos buen feeling para las etapas determinantes del jueves y viernes...” señaló.
Por otra parte, un medio español comentó que Carlos Sainz en su despedida de los medios de su país puso como ejemplo a Sébastien Loeb, diciendo que este rally es absolutamente imprevisible: “...A ver si no acaba ganándolo...” sentenció, aunque repito, se deberá esperar un milagro, pero quien dice que los milagros no existen.