La nómina de los ex presidentes del fútbol paraguayo reúne personalidades destacadas del ámbito político, cultural y deportivo. Se cuenta entre ellos a los que fueron presidentes de la República, como el fundador Adolfo Riquelme y su sucesor Eusebio Ayala. Heroicos militares que defendieron a la patria en la Guerra del Chaco, como Sampson Harrison, Ramón E. Martino y Raúl Fernández Decamilli, de destacada participación como fundador y luego presidente de la Unión del Fútbol del Interior (UFI).
El doctor Crispín Insaurralde fue rector magnífico de la Universidad Nacional de Asunción durante muchos años; don Juan Pablo Gorostiaga dirigió el Consejo Nacional de Deportes durante casi dos décadas; fueron figuras destacadas en la política nacional Raimundo Paniagua y Ernesto Gavilán.
Todos los que ejercieron la presidencia del fútbol paraguayo se destacaron por su pasión futbolera. No extraña entonces que entre los primeros mandatarios peloteros se encontrasen William Paats, el introductor del fútbol en el país, y Junio Quinto Godoi, uno de los primeros futbolistas de nuestro medio.
Están también quienes brillaron en la dirigencia de sus clubes, como Lorenzo N. Livieres, estrechamente vinculado a la historia de Guaraní, lo mismo que Juan Antonio Sosa Gautier o Gerónimo Angulo Gastón y Hassel Aguilar Sosa, de Cerro Porteño, o los olimpistas Lidio Quevedo y Humberto Domínguez.
Los presidentes campeones fueron Alfonso Capurro, de Sol de América, bajo cuya batuta se obtuvo el campeonato de Lima, y Nicolás Léoz, presidente durante el campeonato sudamericano juvenil de 1971 y de la Copa América de 1979.
Fernando Cazenave fue intendente municipal de Asunción y padre de dos generaciones de periodistas, y se destacaron los profesionales Alejandro Gatti, Arturo Lavigne, Francisco Esculies y varios otros.
Las presidencias más prolongadas fueron las de Oscar L. Pinho, desde 1913 hasta 1923. Fue el constructor del estadio de la Liga, en el predio que ocupa actualmente; presidió la reunificación del fútbol dividido en su tiempo y alentó la participación paraguaya en el primer campeonato sudamericano de 1921, con aquella sensacional victoria frente a Uruguay. Bajo su presidencia, también fuimos finalistas de la Copa América de 1922 y derrotamos a Argentina, en Buenos Aires, por primera vez, en 1923.
Le sigue Jesús Manuel Pallarés Esculies, de cuya familia provienen dos presidentes anteriores: Manuel Duarte Pallarés y Francisco Esculies. Pero el de gobierno más prolongado es el actual, Oscar Harrison, hijo de un ex presidente y tiene el honor de haber presidido la institución para la conquista de la única medalla olímpica de la historia del deporte paraguayo y haber clasificado tres veces consecutivas a la selección nacional para los campeonatos mundiales de Francia, Corea/Japón y ahora Alemania 2006.
pitotroche@yahoo.com.ar
El doctor Crispín Insaurralde fue rector magnífico de la Universidad Nacional de Asunción durante muchos años; don Juan Pablo Gorostiaga dirigió el Consejo Nacional de Deportes durante casi dos décadas; fueron figuras destacadas en la política nacional Raimundo Paniagua y Ernesto Gavilán.
Todos los que ejercieron la presidencia del fútbol paraguayo se destacaron por su pasión futbolera. No extraña entonces que entre los primeros mandatarios peloteros se encontrasen William Paats, el introductor del fútbol en el país, y Junio Quinto Godoi, uno de los primeros futbolistas de nuestro medio.
Están también quienes brillaron en la dirigencia de sus clubes, como Lorenzo N. Livieres, estrechamente vinculado a la historia de Guaraní, lo mismo que Juan Antonio Sosa Gautier o Gerónimo Angulo Gastón y Hassel Aguilar Sosa, de Cerro Porteño, o los olimpistas Lidio Quevedo y Humberto Domínguez.
Los presidentes campeones fueron Alfonso Capurro, de Sol de América, bajo cuya batuta se obtuvo el campeonato de Lima, y Nicolás Léoz, presidente durante el campeonato sudamericano juvenil de 1971 y de la Copa América de 1979.
Fernando Cazenave fue intendente municipal de Asunción y padre de dos generaciones de periodistas, y se destacaron los profesionales Alejandro Gatti, Arturo Lavigne, Francisco Esculies y varios otros.
Las presidencias más prolongadas fueron las de Oscar L. Pinho, desde 1913 hasta 1923. Fue el constructor del estadio de la Liga, en el predio que ocupa actualmente; presidió la reunificación del fútbol dividido en su tiempo y alentó la participación paraguaya en el primer campeonato sudamericano de 1921, con aquella sensacional victoria frente a Uruguay. Bajo su presidencia, también fuimos finalistas de la Copa América de 1922 y derrotamos a Argentina, en Buenos Aires, por primera vez, en 1923.
Le sigue Jesús Manuel Pallarés Esculies, de cuya familia provienen dos presidentes anteriores: Manuel Duarte Pallarés y Francisco Esculies. Pero el de gobierno más prolongado es el actual, Oscar Harrison, hijo de un ex presidente y tiene el honor de haber presidido la institución para la conquista de la única medalla olímpica de la historia del deporte paraguayo y haber clasificado tres veces consecutivas a la selección nacional para los campeonatos mundiales de Francia, Corea/Japón y ahora Alemania 2006.
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