Los hombres de José Mourinho llegaron al KCOM Stadium de Hull con la cómoda ventaja del 2-0 de la ida y, pese al gol inicial de Huddlestone y tanto de Niasse en los instantes finales, no se dejaron sorprender y reservaron su billete para Londres.
El técnico portugués, tres veces ganador de la Copa de la Liga -sólo Alex Ferguson y Brian Clough (4) tienen más-, y sabedor de la importancia del duelo, apostó por un once con sus mejores hombres: Ibrahimovic, De Gea, Pogba, Herrera, Smalling o Carrick fueron titulares esta noche.
Por su parte, el renovado Hull de Marco Silva, considerado por muchos como el 'sucesor de Mourinho', presentó siete modificaciones con respecto al equipo que perdió el fin de semana ante el Chelsea, entre ellas las de Niasse y del joven Bowen, de 20 años.
Empezaron muy fuerte los Tigers, sabedores de que sus opciones de clasificación, si bien remotas, pasaban por un gol temprano. Al filo de la media hora, Niasse no consiguió aprovechar un fallo en la salida de la zaga del United y su disparo a bocajarro lo despejó de puños un seguro De Gea.
Hull tuvo su recompensa poco después, tras una más que controvertida decisión del árbitro, que decretó un polémico penalti por falta de Rojo sobre Maguire. No falló desde los 12 pasos Huddlestone y los locales entraron de lleno en la eliminatoria.
Con los 'Tigers' buscando abrir el marcador llegó la mejor ocasión de los visitantes, obra de Ibrahimovic, en el minuto 37: el balón le quedó en el balcón del área y soltó un derechazo que despejó milagrosamente Marshall.
El partido se volvió de ida y vuela en la segunda mitad, con ambos equipos en busca del gol. Los de casa para forzar la prórroga y los visitantes para dejar sentenciada la eliminatoria.
Diez minutos después de que el United reclamara un penalti sobre Smalling llegó el tanto del empate, obra de Pogba. El francés empujó con la puntera al fondo de las mallas un balón mal rechazado por la defensa para colocar al United con pie y medio en la final de Wembley.
El argentino Rojo pudo dejar la eliminatoria sentenciada en el minuto 73, pero su cabezazo lo repelió milagrosamente el travesaño. Cinco minutos más tarde fue Niasse el que tuvo el gol en su cabeza tras un córner botado por Evandro, pero el larguero se interpuso entre él y el gol.
Cuando parecía que el duelo acabaría con empate, Niasse, llegado al club en calidad de cedido por el Everton, dio alas a los suyos con un buen gol en el 85: Markovic abrió a la derecha a Meyler y éste, de primeras y con el empeine, la puso en el área pequeña para que el delantero africano mandara el esférico al fondo de la red.
Pese al empuje final del Hull, el marcador del KCOM Stadium no se volvió a mover y el United, pese a caer por 2-1, logró el pase a la final -la primera de Mourinho con los Diablos Rojos-, donde ya espera el Southampton, verdugo el miércoles del Liverpool.