Un ropero de buena madera en Tigre

Federico Santander (21 años) está pasando por su mejor momento desde que arribó al fútbol argentino. Tras su paso en el Toulouse francés, y regreso a Guaraní, a principio del 2012 fichó por Racing de Avellaneda y desde julio pasado se encuentra en Tigre.

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Una inoportuna lesión muscular lo dejó fuera del partido de esta noche ante Libertad. Esta siesta recibió a ABC Color en su domicilio situado en el lujoso “Country Marinas Golf” de esta provincia.

Santander es un chico que impresiona por su porte físico. Casi 1,90 de estatura, 88 kilos de puro músculo y un gran dominio del juego aéreo son su carta de presentación. Y esas cualidades encajan perfectamente en los tiempos modernos del fútbol, compuesto de tupidas defensas, en la que solo se rompen con juego de pelota parada y a puro centrazos. “Aquí (en Tigre) practicamos mucho las jugadas preestablecidas. Tenemos jugadores que van bien arriba y mi juego encaja perfectamente en el esquema táctico del técnico (Néstor Gorosito), explica el “9”.

“Ropero” como se lo conoce afectuosamente a Santander, en los primeros seis meses del año pasado pasó casi desapercibido en Racing de Avellaneda. Al arribar a Tigre a mitad de temporada recuperó protagonismo y después de haberle convertido aquel gol de cabeza a Cerro Porteño, que valió para que Tigre avance a las semifinales de la Copa Sudamericana del 2012, adquirió el rótulo de ídolo de la afición tigrense.

“Racing me contrato por pedido del entrenador Alfio “Coco” Basile, pero a los pocos partidos y luego de perder el clásico ante Independiente presentó renuncia y la verdad que en ese club tuve pocas oportunidades de jugar. En Tigre juego seguido y por suerte las cosas me están saliendo bien. En aquellos encuentros ante Cerro Porteño estuvimos muy motivados ya que la prensa en general nos daba como eliminados antes de jugar y esa condición se acentuó luego de la derrota en Asunción.

Pudimos remontar de local y llegar a la final. Nos dejo un sabor agridulce el no campeonar. Por un lado estábamos satisfechos por acceder a la definición del torneo y por el otro nos quedamos con las ganas por no jugar el segundo tiempo ante Sao Paulo”.

En enero se habló de la vuelta de Santander Guaraní, “El presidente Juan Alberto Acosta quiso que regrese por la deuda que tiene Racing con Guaraní, sin embargo “Pipo” (por Gorosito), intercedió para que continúe y no me arrepiento. Además jugar en el exterior te posibilita a realizar una buena diferencia económica”.

Un pequeño desgarro lo sacó del partido ante Libertad, “luego del encuentro ante Independiente sentí que tenia cargado el muslo posterior y en la semana sentí como un pinchazo que me obligará a no jugar por 10 días”.

Federico ya tuvo su experiencia en la selección absoluta, “depende de lo que pueda rendir en Tigre para ser convocado de nuevo. A todo jugador le ilusiona el poder integrar el seleccionado de su país”.

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