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El Tribunal determinó ayer que Luqueño juegue sus próximos dos partidos sin la presencia de los hinchas del equipo. Además, sancionó a los “Chancholigans” por un año sin poder asistir a los estadios y a su líder César Cáceres (Alias TOTE) por dos.
La directiva del auriazul reaccionó inmediatamente con un comunicado de rechazo “enérgico y categórico” a la resolución.
Hoy, los luqueños presentaron una nueva nota de pedido de “reconsideración urgente” a la APF. El comunicado argumenta que la decisión del Tribunal “produce un perjuicio grave e irreparable para el club Sportivo Luqueño” porque se privaría “de manera infundida y arbitraría” a los seguidores que no forman parte de la “hinchada organizada”.
La nota presentada añade que en caso de que no se permita asistir a los aficionados se pueda jugar el duelo ante Deportivo Capiatá de mañana en el estadio Feliciano Cáceres. El escenario se encuentra suspendido por problemas estructurales pero el campo de juego sí estaría en condiciones.