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Paraguay tiene nuevo entrenador y es Guillermo Barros Schelotto. El argentino reemplazará a Eduardo Berizzo y firmará un vínculo hasta 2024. El mellizo, asistido por el hermano Gustavo, quien trabajó con Gregorio Pérez en Libertad y Olimpia, dirigirá por primera vez a una selección ya que anteriormente solo condujo a clubes como Lanús, Boca Juniors y Los Ángeles Galaxy. En el Granate, donde debutó en 2012, tuvo a Gustavo Gómez, Víctor Ayala y Miguel Almirón.
Después del paso por el conjunto del Sur de Buenos Aires y una frustrada experiencia en el Palermo de la Serie A de Italia, los Barros Schelotto sustituyeron a Rodolfo Arruabarrena en el Xeneize, donde Guillermo había ganado todo como jugador entre 1997 y 2007. El estratega estuvo dos años en Boca, ganando consecutivamente dos torneos locales, pero perdiendo la histórica final de la Copa Libertadores 2018 contra River Plate en Madrid.
En la estadía en el Azul y Oro, Guillermo también dejó otros episodios, muy recordados porque fueron captados por los medios argentinos. El DT trabajaba a puertas abiertas, con la presencia de los periodistas, y en dos oportunidades debió intervenir: una corrigiendo movimientos tácticas y decisiones de los jugadores y en otra, muy enojado, tirando la planilla contra el césped y expulsando a dos futbolistas por una pelea en plena práctica de fútbol.
En un ejercicio, Guillermo conversó con el plantel y señaló que “tienen prohibido tirar centros de mierda”. “Yo quiero que juguemos a la pelota. Atacar rápido y terminar rápido. Pero terminar rápido no es hacer cualquier pelotudez. Terminar rápido es el mejor pase, la mayor velocidad, para dañar lo máximo posible al rival, para hacer el gol (…) Tienen prohibido tirar centros de mierda”, apuntó a los jugadores. La frase fue patentada por un hincha en unas remeras.
En el otro capítulo, también en Casa Amarilla, el predio de entrenamiento de Boca, Guillermo echó a Juan Manuel Insaurralde y Jonathan Silva, quien fueron a los puños en pleno entrenamiento. “La puta madre, afuera los dos”, disparó el DT, que visiblemente enfurecido continuó recriminando a los dos futbolistas, que jugaban en el mismo equipo. “Si quieren no vengan más. Qué mierda se piensan que están haciendo acá”, siguió el nuevo conductor de la Albirroja.