“Ha sido una noche difícil”, dijo Seedorf, exjugador del Real Madrid, en una rueda de prensa en el estadio Olímpico “Engenhão”, de Río de Janeiro, donde ha jugado en el Botafogo el último año y medio.
En sus 22 años de carrera deportiva, Seedorf ganó la Liga de los Campeones con tres equipos diferentes: el Ajax de Amsterdam, el Real Madrid y el Milán.
El holandés agradeció a su último club y dijo que su experiencia en este año y medio le hizo “crecer mucho” y le “ayudará” en su “próximo paso” como técnico del Milán.
“Quería cerrar de manera elegante y correcta”, comentó Seedorf en la rueda de prensa, en la que explicó que antes de viajar al Milán pretende despedirse de sus compañeros, que están concentrados en la ciudad de Saquarema.
Seedorf dijo que pretendía quedarse en el Botafogo para jugar la Copa Libertadores, pero el cese de Massimiliano Allegri precipitó su decisión.
“Con certeza (la destitución de Allegri) fue decisiva. Yo estaba entrenando ayer. La llamada llegó después del entrenamiento”, afirmó Seedorf.
Para tomar su decisión, el holandés valoró que el Milán es un club que le “dio diez años de fútbol” y que tiene una “relación muy fuerte” con presidente del club, Silvio Berlusconi.
“Cuando el presidente me lo pidió, no podía decir que no”, agregó.
El presidente del Botafogo, Mauricio Assumpção, elogió las cualidades técnicas y personales de Seedorf y puntualizó que su papel “más importante” en el club fue su colaboración en el desarrollo de la cantera del club carioca.
El centrocampista holandés llegó al Botafogo en 2012, año en el que ganó el Campeonato Carioca. En la liga brasileña que acaba de terminar terminó cuarto, logrando la clasificación del equipo a la próxima Copa Libertadores.