El diario deportivo explicó que el club le puso una condición: desvincularse del que ha sido su consejero hasta ahora, Donato Di Campli, al que responsabiliza de la actitud del jugador en los últimos tiempos, cuando intentó forzar su traspaso al Barcelona.
Verratti anunció ayer en su cuenta de Instagram: “La única persona que puede legítimamente gestionar mis intereses deportivos es Mino Raiola”.
Agradeció en ese mismo mensaje a Di Campli su “excelente trabajo realizado hasta ahora” y le manifestó su “más profunda estima”, justo después de que le hubiera conseguido un contrato publicitario con Nike de unos 30 millones de euros en diez años.
Según L'Équipe, Raiola se desplazó estos últimos días a Miami, donde estaba concentrado el PSG, para convencer a Verratti y hablar de las modalidades de la prolongación de su contrato con el club de la capital francesa.