El equipo blanquiazul estaba en inferioridad numérica desde el minuto 60 por la expulsión de Gary O'Neil, pero aun así tuvo arrestos para mantener el tipo e incluso obtener al final el tanto del triunfo y del ascenso.
Zamora había reemplazado a los 57 minutos a Kevin Doyle y fue el hombre del partido al sellar, en esta final de la fase de ascenso, la victoria del QPR, que había terminado la Liga por detrás del Derby. Leicester y Burnley habían obtenido el ascenso directo al ser primero y segundo.