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En medio de la crisis, hay una buena para Olimpia. El Decano reincorporó a Víctor Salazar, quien retornó a los entrenamientos después de las lesiones que sufrió en el rostro por el golpe del uruguayo Giorgian de Arrascaeta en la ida de los cuartos de la Copa Libertadores contra el Flamengo. El lateral fue asistido en pleno césped del Manuel Ferreira y estuvo un par de días internado producto de las fracturas en la órbita ocular y los huesos de la nariz.
Salazar entrenó el lunes en la Villa, donde realizó actividades físicas en el gimnasio. El argentino deberá recuperar la forma física después de varios días de inactividad (desde el 11 de agosto) para regresar al equipo. En principio, el tiempo de baja, por la recuperación, es de un mes. Semanas atrás, el jefe médico del club había expresado que el futbolista podía practicar con un protector, pero en esta oportunidad, no fue necesario.