Hasta el minuto 88 del duelo del estadio San Paolo, todo parecía encaminado para que el líder Juventus se escapara a más de siete puntos en la tabla sobre el Nápoles, pero allí aparecieron el polaco Arkadiusz Milik y el guineano Amadou Diawara para dar un triunfo épico a su equipo.
El Nápoles encaraba el duelo con el Chievo sin margen de error después del triunfo 4-2 del Juventus ante el Benevento con triplete del argentino Paulo Dybala, pero le costó tomar el mando ante unos veroneses muy organizados a nivel defensivo.
Tras el 0-0 de la primera mitad, el Nápoles se volcó al ataque y consiguió una pena máxima en el 50, pero el meta Stefano Sorrentino le negó a Mertens la alegría del gol al detener su tercer penalti del año.
Los napolitanos apretaron con fuerza, pero les faltó acierto y hasta terminaron siendo castigados por el Chievo, que aprovechó un fallo defensivo del senegalés Kalidou Koulibaly para adelantarse en el 73.
El exjugador de los “azzurri” Emanuele Giaccherini recuperó el balón y lo entregó a Stepinski, que fulminó al meta español Pepe Reina con un derechazo que entró por la escuadra y que dejaba al Nápoles contra las cuerdas.
No faltó la reacción del Nápoles, aunque la desventaja parecía ya irremediable después de que Lorenzo Tonelli cabeceara al larguero y Sorrentino siguiera luciéndose por unas grandes intervenciones.
Sin embargo, en el 89 Milik aprovechó un centro de Lorenzo Insigne pare subir el 1-1 en el marcador y, en el último minuto del tiempo añadido, apareció Diawara, que recogió un rebote en el área de penalti y ajustó el balón al segundo poste con un derechazo curvado.
Fue el gol que desató la euforia de la hinchada del San Paolo y que colocó al Nápoles a cuatro puntos de distancia del líder Juventus, cuando faltan dos jornadas para el choque directo del 22 de abril en Turín.
El programa dominical se abrió con la derrota 0-1 del Inter de Milán en el campo del Torino, en un partido decidido por un gol del serbio Adem Ljajic, exjugador del conjunto milanés, que marcó tres en el curso 2015-16 vivido con los “nerazzurri”.
Hacía 24 años que el Inter no caía en sus visitas al Torino y el equipo del técnico Luciano Spalletti podría perder su cuarta posición a favor del Lazio, si los romanos ganan este domingo su partido contra el Udinese.
Esta jornada registró además dos triunfos fundamentales del Crotone y del Hellas Verona de cara a su lucha por la permanencia.
El Verona interrumpió una racha de tres derrotas consecutivas al ganar 1-0 al Cagliari gracias a un penal marcado por el brasileño Rômulo Souza Orestes Caldeira, mientras que el Crotone venció 1-0 al Bolonia con diana decisiva del nigeriano Simeon Tochukwu Nwankwo.
Fueron tres puntos determinantes para el Crotone, que alcanzó al Spal de Ferrara, con 27 puntos, que ocupa la última plaza válida para mantener la categoría; por su parte, el Verona suma ahora 25 puntos y sigue vivo en la lucha por la permanencia.
El programa de la trigésima primera jornada seguirá con el Udinese-Lazio y se completará con el duelo de San Siro entre el Milan y el Sassuolo.