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“El nivel del empastado está muy acolchado, por abundancia de pasto; eso se está rebajando. Se saca el pasto sobrante de los 28 milímetros, para llegar a los 22 de nivel, que es el parámetro internacional con el que contamos”, explicó Bernardino Caballero, administrador del estadio, que trabaja con los ingenieros Gilberto Caballero y Lucas Fleitas, este último llegado desde la Argentina para asesorar en estas modificaciones.
“Con los cambios se contribuirá a la mayor velocidad de traslado del balón y, fundamentalmente, para la preservación, en su juego, de los futbolistas. Debemos sacar las impurezas: para el clásico del 25 va a estar a punto”, dijo Caballero. Los trabajos de remodelación y mejora siguen en distintos sectores, como en los palcos, vestuarios y plateas. También continúan las tareas en los palcos privados y sector de Preferencias, que serán entregados hoy. Los vestuarios están siendo renovados y a fines de enero comenzarán las tareas en las Plateas, con la construcción de gradas que bajarán hasta la altura del terreno de juego.