Cargando...
El 4 de noviembre de 2016 fue el último compromiso oficial que disputó Matías Pérez, un defensa de 24 años que sufre por la complicación de una lesión que se produjo en un amistoso.
“Es un infierno. Justo en el momento en el que jugaba bastante me pasó esto. Ya es más de un año”, comenzó lamentando el jugador de Nacional, que en ese entonces defendía los colores de Rubio Ñu.
“En el 2016, en un amistoso contra Guaraní en fecha FIFA, cuando terminaba el campeonato, siento un pinchazo en la pierna. Los estudios diagnosticaron una fractura por estrés”, explicó en comunicación con el Cardinal Deportivo.
El jugador fue operado; no obstante, contó que “a las ocho horas de la cirugía ya tuve fiebre. Estuve 15 días en cama por una infección intrahospitalaria. Ahí empezó el calvario”.
Pérez comenzó con los tratamientos, mas el dolor continuaba. “Hice varios tratamientos pero nunca se consolidó el hueso”, sostuvo. El defensa, que debutó a los 17 años, tiene que volver a operarse y está charlando con la gente de Nacional.
En diciembre del 2017 venció su contrato con Rubio Ñu, y hasta esa fecha, el club albiverde cumplió con él. “Rubio Ñu cumplió conmigo, siempre estuvo al día: en salario, en premios ganados. El presidente (Rubén Ruiz Díaz) no me dejó solo en ese momento malo”, indicó. Para esta nueva operación aguarda que la gente alba también haga respetar su palabra.
Su familia también lo apoyó. “Gracias a mi familia estoy pudiendo sobrellevar (...) Es imposible contener el llanto, porque venía jugando 16 partidos, hice goles, jugué bien ante los grandes y me pasó esto”, sentenció.
El jugador se destacó en Nacional, jugó el Mundial Sub 20 de Turquía 2013, pasó por el Sporting de Portugal, el Sportivo San Lorenzo y Rubio Ñu.