Un gol del francés Yohan Cabaye a la hora de juego le dio el triunfo al Newcastle, que consiguió su primer triunfo en Old Trafford desde 1972.
Es la primera vez desde 2002 que el Manchester United pierde dos partidos seguidos en casa.
El Manchester United, en diciembre, ya acumula el mismo número de derrotas que en toda la temporada pasada, cinco, y la figura del escocés David Moyes comienza a estar seriamente en entredicho. “Forma parte del trabajo, ¿no? Cuando decidí venir, sabía que habría momentos que no serían fáciles”, aseguró el técnico escocés.
Y es que si el Arsenal gana su partido, el domingo ante el Everton en casa, contará con una ventaja de 15 puntos sobre los ’Diablos Rojos’.
“Estoy decepcionado por el resultado. Creo que ha habido momentos en el partido en los que nos ha faltado creatividad y en los que no hemos tenido suerte, no hemos aprovechado nuestras oportunidades”, añadió el técnico.
Moyes negó, además, que este resultado aleje definitivamente a su equipo del título de la Premier League. “Me mantengo firme y creo que estaremos muy cerca de conseguirlo”, explicó.
Los locales no pudieron contar con su delantero Wayne Rooney, por sanción, pero recuperaron al holandés Robin Van Persie, que actuó de inicio. Aún así, no fue suficiente.
Tras una mala primera mitad, los de Manchester salieron con energías renovadas tras el descanso pero en el minuto 61, una cabalgada del francés Moussa Sissoko por la banda derecha y un posterior remate de su compatriota Cabaye acabaron con las esperanzas locales.
El Manchester United se queda con 22 puntos, suma cuatro partidos consecutivos sin conocer la victoria y sólo ha conseguido 2 de los últimos 12 puntos.
El Newcastle, por su parte, que se coloca en sexta posición de forma provisional, continúa con su buena racha y, con 26 unidades, confirma que su derrota del miércoles ante el Swansea (3-0) fue un simple accidente.
“Hacía 41 años que esperábamos esta victoria. Ha sido una actuación magnífica”, apuntó el técnico visitante Alan Pardew.