Un doblete del hispano-marroquí Munir y los tantos de Álvaro Medrán y Rubén Sobrino dieron el claro triunfo al conjunto vasco en la despedida del equipo canario de la Primera División, en una jornada marcada por las continuas protestas de sus aficionados, frustrados por el desenlace de una temporada para borrarla del historial.
En un ambiente enrarecido, con el presidente Miguel Ángel Ramírez, y el entrenador, Paco Jémez, en el centro de la diana de los reproches del público, fue Las Palmas quien sobre el campo tuvo mayor posesión, aunque fue prisionero de sus limitaciones.
El partido acabó con un duro resultado en contra para Las Palmas, en su despedida de la categoría, pero su destino había quedado sentenciado mucho antes. Mientras, el Alavés pudo celebrar la salvación matemática que ha encontrado tras reaccionar con la llegada al banquillo de Abelardo.