“Lo siento por todo el mundo; por el equipo, por todo el club... que mis errores hayan costado tan caros”, añadió.
“Si pudiera regresar atrás en el tiempo lo haría. Lo siento mucho por mi equipo, les dejé caer. Es muy duro para mí ahora mismo, pero es la vida de un portero. Estos goles nos costaron el título, claramente”, continuó.
Karius, de 24 años, cometió dos errores muy graves, que costaron dos goles: el primero llegó tras un intento de pase del arquero que Karim Benzema interceptó y en el tercero no blocó un balón tras un disparo lejano de Gareth Bale.
Entre lágrimas al final del partido, el alemán acudió a la zona de los aficionados del Liverpool para pedirles disculpas.