En clima de fiesta, el jugador retornó al club que lo lanzó al profesionalismo en 2001 y en el que permanecerá hasta su partida en 2015 al Orlando City, equipo de la liga estadounidense que acaba de ficharlo del Milán.
“Estoy loco para jugar”, afirmó emocionado el jugador al momento de vestir la camiseta número “ 8” ante los miles de hinchas que vitoreaban su nombre y luego de agradecer su retorno después de once años al club.
El experimentado portero Rogerio Ceni, capitán, y el artillero Luis Fabiano fueron los encargados de brindarle la recepción a Kaká.
El Sao Paulo pretende tener listo a Kaká para su debut el 19 de julio contra el Chapecoense, en casa, en juego válido por el Campeonato Brasileño.
Entre 2001 y 2003, Kaká disputó 131 partidos con el Sao Paulo y marcó 48 goles.
En la rueda de prensa posterior a su presentación, Kaká pidió cambios en el calendario del torneo brasileño, para evitar el “desgaste” de los jugadores y se refirió también a las críticas que recibía cuando salió del equipo en 2003.
“Eso hizo que madurara y la demostración de cariño de hoy es un incentivo. Ellos querían mi regreso y yo también. Todo el mundo está feliz”, apuntó Kaká, para quien su partida a Estados Unidos no significa “un fin de carrera” ni fue por una “prioridad financiera”.
“Podría haber ido a Asia, pero escogí Estados Unidos y espero ayudar como embajador de esa liga”, resaltó el jugador, quien “en un principio” manifestó estar definitivamente por fuera de la selección brasileña, pero que ahora abre una nueva posibilidad de retorno a la Canarinha.
Así, el creativo aseveró: “En un principio no jugaba más (con la selección), pero ahora no sabemos lo que puede pasar”.
Destacó poder jugar al lado de Paulo Henrique Ganso, uno de los centrocampistas creativos más importantes de la liga brasileña, y de atacantes con amplio recorrido en el fútbol internacional como Luis Fabiano y Alexandre Pato.