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Aunque es un amargo recuerdo porque la pelota no entró en la portería rival, Pinilla decidió inmortalizar la escena en el que la pelota se estrella en el travesaño defendido por Julio César.
Además de la jugada, el delantero de la “Roja” se grabó en la piel la frase: “Un centímetro de la gloria”, pues de haber convertido podría haber sido triunfo de Chile sobre Brasil en tiempo normal.
Además de las imagen tatuada en la espalda, Mauricio Pinilla también se estampó en el rostro dos frases. En la parte derecha, “Blessed” (Bendecido), mientras que en el lado izquierdo decía “For Life” (De por vida).
Las imágenes fueron subidas al Twitter a través de la cuenta “Tattoo Rockers”, local donde Pinilla se hizo los tatuajes.