De hecho, apenas habían trascurrido tres minutos de juego cuando comenzó la pesadilla para el conjunto parisino, el vigente campeón, que vio como el Espaly, equipo de la quinta categoría del fútbol francés, no desaprovechaba una mala salida del guardameta español Arnau Tenas para adelantarse en el marcador con un gol del albanés Kevis Gjeci.
Una renta que el equipo local que lograron mantener hasta falta de ocho minutos para el fina de la primera mitad, cuando Warren Zaire-Emery igualó la contienda (1-1) para el París Saint-Germain con un potente y preciso disparo desde fuera del área.
Tanto que pareció despertar definitivamente a los de Luis Enrique que dieron definitivamente la vuelta a la eliminatoria con un gol de Desiré Doué, que firmó el momentáneo 1-2 a los sesenta y siete minutos.
Pero cuando todo parecían encaminado para la victoria del París Saint-Germain el modesto Espaly volvió a meterse se lleno en la lucha por la clasificación con un gol (2-2) a los 71 minutos de Maxence Fournel que hizo soñar a los locales con forzar la tanda de penaltis. Un sueño que se encargaron de romper con dos zarpazos en los minutos finales Bradley Barcola, que firmó el 2-3 a los 88 minutos, y el portugués Gonçalo Ramos que estableció en el 94 de penalti el definitivo 2-4 para los de Luis Enrique.