Momentos de la jornada 19

Madrid, 12 ene (EFE).- Momentos de la jornada 19 de LaLiga EA Sports:El campeonato de invierno del Atleti con récord Nunca en la dilatada carrera de Diego Simeone como entrenador del Atlético de Madrid había logrado enlazar catorce triunfos consecutivos. Gana todo lo que juega desde el 31 de octubre. Parece mentira pero aún quedan registros por superar al técnico argentino que ha logrado meter de lleno a su equipo en la pelea por el título. Líder en el momento en el que, al fin, todos los aspirantes a la corona han disputado el mismo número de partidos.

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Gracias a uno de esos partidos trabajados que cuestan descifrar y que se decidan a balón parado. Arma letal en el pasado del Cholo y que ahora da menos réditos. Vencedor Luis García Tevenet, ideólogo en la sombra de acciones como la que acabó en la red. Griezmann en corto con De Paul, pase de vuelta y centro del francés al segundo palo para sorprender el movimiento de la defensa hacia la zona del balón. La aparición sorpresiva de Clement Lenglet, el toque atrás y el remate placentero de Julián Alvarez. El Atlético de Madrid, que llegó a estar a diez puntos del liderato del Barcelona, desafía la estadística y es campeón de invierno. LaLiga es cosa de tres.

Mamardashvili frena la reacción

Cuando parecía que el Valencia se levantaba con el cambio de técnico. Cuando saboreaba el triunfo de visitante nueve meses después, en un Ramón Sánchez-Pizjuán encendido contra la directiva sevillista. De la forma más cruel, de nuevo en el tiempo añadido como ante el Real Madrid en Mestalla y con un error individual del portero a un lanzamiento lejano al que tuvo tiempo suficiente de reaccionar.

Resucitaba a tiempo el equipo ché, para posicionarse a sólo dos puntos de la salvación tras una de las peores primeras vueltas de su historia, pero el descaro de Pedrosa con su zurdazo lejano, se asoció con la mala colocación de Giorgi Mamardashvili. Uno de los mejores porteros de LaLiga cometió un error de principiante. Confiado en poder despejar el disparo a córner, sus brazos de doblaron y el mismo sentimiento que tuvo al ver entrar el esférico en su portería, lo compartió con cada uno de sus compañeros y todo el valencianismo. Del respiro al puesto de colista en segundos por un fallo.

Silencio y cabeza

La celebración de Kike Pérez fue el mejor de los consejos para todo el Real Valladolid. Se llevó la mano derecha a la boca, realizando un gesto de silencio, y a la vez con la mano izquierda, apuntó a su sien pidiendo cabeza. Todo tras una gran celebración por la importancia de un gol que dio el triunfo, el cuarto en LaLiga, el tercero en Pucela, el primero con Diego Cocca al mando.

Entró con potencia desde segunda línea Kike Pérez en la zona del 9, para rematar con potencia y a placer el centro desde la izquierda. Un tanto merecido para tumbar a un Real Betis apático. Igualó a Raúl Moro como máximo artillero de la campaña del Valladolid y lanzó un mensaje de lucha: "Estamos vivos". De momento, abandonó el último puesto de la clasificación en la dura batalla por la permanencia.

La patada al aire de Diarra

Minuto 91, se cumplía el primero de los tres de añadido por el colegiado en Mendizorroza. No había tirado a puerta el Girona en todo el partido en su visita al Alavés. De un centro lateral al corazón del área, sencillo para el despeje de un central, nació la acción que decidió un partido que acabó siendo un castigo excesivo para el equipo de Vitoria.

Moussa Diarra no precisó el golpeo del balón. Su intención de despeje acabó con el balón muerto a la aparición a espalda de los centrales de John Solís que marcó a placer un tanto que mete al Girona de lleno en la pelea por puestos europeos. Las cosas del fútbol. De un cambio defensivo, como confesó Míchel, a marcar el tanto de un triunfo que nadie esperaba en Vitoria y que deja al Alavés al borde del precipicio, ya con un sólo punto de colchón a la zona de descenso.

El penalti de David Soria

En la temporada con la plantilla más justa que el Getafe ha dado a José Bordalás, el técnico cierra la primera vuelta con dos triunfos consecutivos y a tres puntos de la zona de peligro. Con el respiro de recuperar a un jugador referente en punta como Borja Mayoral y sostenido por su portero, David Soria, que fue decisivo en el primer triunfo liguero azulón de visitante del curso.

Especialista en las penas máximas, David Soria adivinó el lado por el que se decantó Fábio Silva para lanzar. Estirada, mano firme para frenar en seco el balón y rápida reacción para blocarlo impidiendo a rivales llegar antes. El partido estaba empatado a cero. Su acción fue decisiva y dio paso a los dos tantos posteriores, de la pareja Coba-Mayoral, de un partido que cambia el dirección el viento que corría por Getafe.

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