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Alexander Isak, en plena efervescencia goleadora, fue protagonista en el Newcastle, que puso pie y medio para la final. El Newcastle disfruta del buen momento de Isak, que se encargó de abrir el marcador cuando el encuentro marchaba igualado e incluso peligroso para las “Urracas”, que se salvaron del 1-0 gracias a la mala fortuna de Kai Havertz, que a la media hora mandó al palo un mano a mano ante Martin Dúbravka.
El error de Havertz no lo cometió Isak, que al borde del descanso (37′) puso los cimientos de la victoria del Newcastle. Isak tuvo incidencia en el segundo tanto del Newcastle.
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Rodeado de tres jugadores (Myles Lewis-Skelly, Gabriel y Thomas Partey), se sacó de la chistera un hueco para armar un disparo que salvó como pudo Raya. El rechace lo recogió Anthony Gordon, que remachó la faena sin piedad (57′).
El rival en Wembley del ganador de esta serie, el 16 de marzo, saldrá del juego entre Liverpool y Tottenham, hoy a las 17:00.