El Milan ganó, pero no convenció lo más mínimo. Y Leao volvió a estar en el banquillo por tercera jornada consecutiva. Volvieron los ‘rosoneri’ a ser un equipo que no defiende bien y al que le cuesta hacer daño arriba. Un combinado destartalado, privado de organización colectiva y encomendado a acciones individuales o errores del rival para poder sacar adelante los partidos.
Lejos de dominar al Monza, estuvo a su merced durante buena parte del encuentro. Y eso que el Monza, en descenso, es una especie de 'hermano pequeño' al ser el equipo que llevó a lo más alto el magnate Silvio Berlusconi -histórico presidente del Milan- y el equipo que entrena Alessandro Nesta y en el que juega Daniel Maldini, ambos exmilanistas.
Pero lo cierto es que durante los noventa minutos no hubo diferencias entre un equipo que debería aspirar a todo y otro que pelea por no caer en Serie B. Tuvo que salir al rescate en varias ocasiones Mike Maignan con grandes paradas para mantener a flote a los suyos y, en las que no pudo, apareció la suerte. Como cuando Maldini se estrelló con el palo. Es más, el Monza se adelantó en el marcador en los primeros compases, pero el árbitro anuló el tanto por falta en la jugada previa.
Tuvo muy poca capacidad de respuesta el combinado de Paulo Fonseca, que vuelve a estar en el punto de mira por el mal juego del equipo. Solo cuando el Monza cometió dos errores en defensa tuvo opciones. La primera en salida de balón, que aprovechó Morata para dejar solo a Okafor, precipitado en la ejecución.
La segunda, en un repliegue que le acabó condenando en el ocaso del primer acto. Porque dejó a su defensa desolada y lo acabó pagando. Terracciano encontró a Morata en un centro lateral. Remató el español, pero Izzo bloqueó el disparo dejando un rechace que Reijnders cazó de cabeza para poner el único gol del partido cuando menos lo merecía el Milan.
Entró Leao en el minuto 60 para intentar desarbolar el gran entramado defensivo del Monza. Tuvo dos ocasiones en apenas media hora, generando más en ese tiempo que su equipo en los primeros 60 minutos.
Theo, aprovechando que el Monza se volcó, tuvo otra para cerrar el duelo, pero Turati mantuvo con vida a un Monza que, pese a que puso todos sus esfuerzos, dejó escapar vivo al Milan en la primera mitad. El martes, el Milan viaja al Bernabéu con la duda principal de si Fonseca se atreverá a dejarlo en el banquillo en un partido tan importante.
Ficha técnica:
0 - Monza: Turati; Izzo, Marì, Carboni (Caprari, m.78); Pedro Pereira (D’Ambrosio, m.65), Bianco, Bondo (Valoti, m.87), Kyriakopoulos; Maldini, Mota (Vignato, m.65); Djuric (Maric, m.78).
1 - Milan: Maignan; Terracciano (Calabria, m.89), Thiaw, Pavlovic, Theo Hernández; Reijnders, Fofana; Chukwueze (Loftus-Cheek, m.81), Pulisic (Musah, m.89), Okafor (Leao, m.63); Morata.
Goles: 0-1, m.43: Reijnders.
Árbitro: E. Feliciani. Amonestó a Djuric (m.53), Bondo (m.83) por parte del Monza; y a Morata (m.47) por parte del Milan.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la undécima jornada de la Serie A, disputado en el Estadio de Brianteo de Monza (norte).