A través de un comunicado emitido en la página web de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), la guardameta del Wolfsburgo informó de que "desde el Mundial del año pasado se tomó la decisión de que el torneo olímpico de París sería el último" con la selección y que "representar" a su país en "dos grandes torneos fue un honor" para ella, aunque "también fue muy exigente física y mentalmente".
"Estoy deseando volver a tener más tiempo para mi familia y mis amigos después de años intensos con una doble carga deportiva. En el futuro dedicaré toda mi energía y toda mi atención al Wolfsburgo. Le deseo todo lo mejor a la selección alemana y al seleccionador nacional Christian Wück. Suerte y máximo éxito en los próximos torneos", concluyó la portera.
El entrenador, que acaba de tomar las riendas de Alemania tras la conclusión de la Olimpiada, afirmó que "le hubiera encantado trabajar con Merle" y así "se lo había dejado claro en una conversación personal".
"Ahora ella ha tomado esta decisión, que por supuesto debo respetar. Merle es una guardameta excepcional que habría jugado un papel importante en nuestra planificación. Le deseo todo lo mejor para su futura carrera en el club", refrendó. EFE.