El Lazio depende de Luis Alberto. Todo el juego pasa por el centrocampista español y hasta que no aparece en zona de tres cuartos, el combinado que dirige el italiano Maurizio Sarri sufre para generar superioridades en campo rival.
Ante el Lecce, un equipo que plantó cara y que mantiene un colchón de 6 puntos con el descenso pese a la derrota, los 'biancocelesti' sufrieron en ataque. Con el argentino Valentín 'Taty' Castellanos lesionado y el italiano Ciro Immobile lejos de su mejor nivel, fue el brasileño Felipe Anderson el que ocupó el puesto de nueve. Su movilidad, vital también en este Lazio, fue determinante para el éxito de los suyos.
De hecho, en sus botas estuvo la victoria del duelo. Una combinación veloz entre el italiano Nicolo Rovella y Luis Alberto dio pie a que, desde dentro del área y de primeras, el gaditano habilitara a Anderson para que este fusilara e hiciera el primer y único tanto del partido cuando se iba a cumplir la hora de partido.
A partir de ahí, el Lecce fue menos peligroso y Luis Alberto, con otro partido que dominó, bajó el ritmo y entendió a la perfección lo que necesitaban los suyos para certificar la victoria.
El Lazio, ahora quinto y asomándose a puestos de Liga de Campeones, vuelve a la pelea por Europa tras un inicio complicado. Con Luis Alberto, todo es más sencillo para Sarri. Son cuatro victorias consecutivas en Serie A, una racha perfecta para encarar de la mejor manera la Supercopa de Italia, en la que el próximo viernes se mide al Inter por un hueco en la final.
El Lecce, por su parte, se mantiene en zona media, décimo tercero con 21 puntos, a 6 unidades de los puestos de peligro.