Y eso que en el último minuto de partido el italiano Nicolo Zaniolo evitó la derrota del conjunto de Birmingham y salvó a los villanos de un daño mayor. Pero la presión, la ansiedad, condicionó al Aston Villa, que afrontó el duelo ante un rival, recién ascendido, en zona de descenso, necesitado de triunfos.
El conjunto de Emery asumió el cara a cara en buena línea, como revelación de la Premier, con tres victorias seguidas como bagaje y una propuesta ambiciosa. Pero no encontró el camino del gol y le pudo la precipitación.
Volcado sobre el área del equipo de Chris wilder, cada vez dejaba más espacios atrás. El Sheffield amenazaba a la contra y en una acción aislada, en el minuto 88, aprovechó su ocasión y se puso por delante. Anotó el gol Cameron Archer, que batió al Dibu Martínez al recibir un estupendo pase desde la línea de fondo del neerlandés Gustavo Hamer.
El tanto visitante desquició aún más al Aston Villa, que se volcó otra vez sobre el área de Wesley Foderingham. Y en una de ellas, un centro al área del brasileño Douglas Luiz lo aprovechó, de cabeza, el italiano Nicolo Zaniolo, que poco antes saltó al campo desde el banquillo. Se anticipó al meta, llevó el balón a la red y palió el dolor local.
El empate deja al Aston Villa segundo, igualado a puntos con el líder, el Arsenal, que tiene por jugar su partido de la decimoctava jornada. El Sheffield sigue penúltimo, a cinco puntos de la salvación que marca el Nottingham Forest.