Eslovaquia consiguió su billete para Alemania la pasada jornada tras superar 0-1 a Luxemburgo, el único rival que podía arrebatarle la segunda posición. Superado ese órdago, a los hombres dirigidos por Francesco Calzona sólo les quedaba disfrutar de una última jornada plácida y de celebración.
Bosnia, ya eliminada hace tiempo, besó la lona con los goles de Robert Bozenik y de Lubomir Satka, ambos en la segunda parte y que remontaron el tanto inicial del combinado balcánico obra de Patrik Hrosovsky en propia meta.
Los aciertos de Bozenik y de Satka fueron suficientes para Eslovaquia, que firmó otro éxito rotundo en una fase de clasificación para la Eurocopa, competición en la que participará por tercera vez consecutiva tras las ediciones de Francia 2016 y Europa 2020.