“El premio que los racistas consiguieron fue mi expulsión. No es fútbol es LaLiga”, compartió en una historia de su cuenta oficial en Instagram.
Minutos más tarde, Vinícius escribió en Twitter una reacción más extensa en la que insistió en su idea de que existe permisividad con los racistas.
“No fue la primera vez, ni la segunda, ni la tercera. El racismo es normal en La Liga. La competición lo considera normal, la Federación también y los rivales lo fomentan. Lo lamento mucho. El campeonato que una vez perteneció a Ronaldinho, Ronaldo, Cristiano y Messi ahora pertenece a los racistas”, dijo.
Además, aseguró que en su país, Brasil, a España se le conoce como un “país racista”.
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“Una hermosa nación, que me acogió y a la que quiero, pero que ha aceptado exportar al mundo la imagen de un país racista. Lo siento por los españoles que no estén de acuerdo, pero hoy, en Brasil, España es conocida como un país de racistas. Y, desgraciadamente, por todo lo que ocurre cada semana, no tengo forma de defenderlo. Estoy de acuerdo”, continuó.
“Pero soy fuerte e iré hasta el final contra los racistas. Aunque sea lejos de aquí”, completó.
Vinícius que denunció insultos racistas por parte de un aficionado en el minuto 70 del partido disputado entre Valencia y Real Madrid en Mestalla (1-0). Estos, según desveló más tarde su compañero Lucas Vázquez, fueron hacerle el gesto del mono al brasileño.
El encuentro se detuvo durante ocho minutos y, a pesar de que el brasileño no quiso volver a jugar en primera instancia, decidió hacerlo tras una conversación con su técnico, el italiano Carlo Ancelotti.
Más tarde, ya en el séptimo minuto de añadido, Vinícius reclamó a Yunus Musah que retrasara la reanudación del juego tras retener el balón antes de un saque de esquina, lo que provocó una tangana entre varios jugadores, con el guardameta del Valencia Giorgi Mamardashvili acudiendo a por el brasileño para increparle.
En esta, Hugo Duro agarró del cuello a Vinícius y este, tras librarse de ello, golpeó con el brazo en la cara al delantero del Valencia; lo que, tras revisarse en el VAR, acabó en expulsión de Vinícius.
Después, mientras se marchaba del césped de Mestalla, dedicó un gesto en repetidas ocasiones a la afición del Valencia de que iban a descender a Segunda División; lo que formó otra tangana.