La FIFA permitió el año pasado suspender los contratos de futbolistas y técnicos en la liga ucraniana para que estos pudieran seguir con su actividad deportiva en otros países, algo que, asegura Palkin, ha causado a su club cuarenta millones de pérdidas. La petición de indemnización presentada ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo de Lausana fue desestimada el pasado 13 de enero y el Shakhtar lucha por su supervivencia.
"No estamos satisfechos con la decisión del TAS y vamos a presentar un recurso. Acudiremos a la Corte federal suiza, a la Comisión Europea, porque creemos que la FIFA rompió la legislación antimonopolio", dijo Palkin a EFE.
"Si al final de esta temporada la FIFA sigue usando esta regla, muchos jugadores que fichamos anteriormente van a terminar sus contratos y se van a ir gratis. ¿Cómo podemos vivir en este ambiente?", agregó.
Jugadores clave del proyecto deportivo del Shakhtar como el brasileño Mateus Cardoso Lemos Martins 'Teté', que se marchó al Lyon, o el israelí Manor Solomon, incorporado por el Fulham, dejaron de forma gratuita el club ucraniano al aprovechar la opción prevista por la FIFA.
Se trata de una 'suspensión' de los contratos, por lo que estos jugadores deberían regresar al Shakhtar cuando expire esta norma, pero de ser prolongada más allá de junio de 2023, el Shakhtar vería acabar sus vínculos con muchos futbolistas y los perdería gratis.
"Nuestras perdidas están en 40 millones hasta junio de 2023, pero si la FIFA prolonga la regla un año más, vamos a tener pérdidas por 70 millones. Algunos jugadores terminarán contratos y las pérdidas aumentarán", dijo Palkin.
El directivo manifestó su voluntad de "cambiar el sistema", que, en su opinión, es "muy leal" con la FIFA en estas cuestiones legales.
"También nos reuniremos con el ECA (Asociación de Clubes Europeos) para crear una serie de documentos que cambien el sistema, que nos permitan ganar demandas con la FIFA", señaló.
Eso sí, el club fue protagonista en las últimas semanas de una millonaria operación que llevó al ucraniano Mykhailo Mudryk al Chelsea por una cantidad cercana a los 100 millones de euros.
El dueño del Shakhtar, Rinat Akhmétov, decidió donar 25 millones a los combatientes ucranianos y a sus familias, que resistieron durante meses el asedio ruso.
"El dinero irá a los defensores de Mariupol y a sus familias, para los tratamientos de los combatientes, incluida la terapia psicológica. Si piensas en lo que viven, necesitas ayudarlos", dijo Palkin.
A pesar de las tremendas dificultades que enfrenta Ucrania, Palkin se mostró convencido de que cuando acabe la guerra será posible "reconstruir" su país y convertir al Shakhtar en un club aún más fuerte.