"Durante el Mundial pasarán muchas cosas en el país. Hablemos de los homosexuales. Todo el mundo aceptará que vengan. Pero tendrán que someterse a nuestras reglas", dijo Salman.
Salman dijo que el tenía problemas ante todo cuando niños veían homosexuales porque, dijo, la homosexualidad es algo "haram" (prohibido por la religión en árabe) y los niños pueden aprender algo que no es bueno.
"La homosexualidad es un daño mental", dijo y luego la entrevista fue interrumpida por el portavoz del comité organizador.
La entrevista forma parte de un documental de la ZDF titulado "Catar. Asunto confidencial".
De cara al Mundial han aumentado críticas hacia Catar por la situación de derechos humanos, la discriminación de mujeres y homosexuales y la explotación de trabajadores extranjeros.
Durante el pasado fin de semana en varios estadios de la Bundesliga se vieron pancartas de espectadores que pedían un boicot al Mundial.
El ministro de Exteriores catarí, Mohamed Bin Abdulraman Al Thani, ha calificado las críticas europeas a su país de "arrogantes y racistas" en declaraciones al diario "Frankfurter Allgemeine".