"Terminamos el partido del lunes en Junín, llamé a mi vieja y le dije que no jugaba más", manifestó Ortigoza entre lágrimas en una entrevista con el canal deportivo ESPN.
El pivote defensivo, que volvió al club de Boedo el año pasado en medio de una complicada situación deportiva e institucional, explicó que era "hora de dar un paso al costado" y colgar definitivamente las botas, algo que sucederá el próximo sábado en el encuentro entre San Lorenzo y Aldosivi de la Liga argentina.
"Hoy estoy feliz, tengo sentimientos encontrados. Estoy contento, pero a la vez triste, porque dejo de jugar a la pelota, que es lo que más amo", afirmó.
Durante sus tres etapas en San Lorenzo, Ortigoza disputó un total de 236 partidos y marcó 25 goles, conquistando el torneo doméstico en 2013 y la Supercopa Argentina ante Boca Juniors en 2015.
El punto culminante de su carrera fue en 2014, cuando San Lorenzo consiguió su primera y única Copa Libertadores ante Nacional de Paraguay (1-0) gracias a un gol de Ortigoza de penalti.
Asimismo, el futbolista argentino-paraguayo disputó 134 partidos y anotó 18 tantos con Argentinos Juniors, club con el que ganó el Torneo Clausura 2010, mientras que con Rosario Central alzó la Copa Argentina en 2018.
Ortigoza también fue un habitual de la selección paraguaya, con la que disputó 33 partidos: en 2010 llegó a cuartos de final del Mundial de Sudáfrica, en 2011 fue subcampeón de la Copa América y en 2015 quedó en cuarto lugar en la Copa América.
Además de por sus títulos, el futbolista de 38 años será recordado por su acierto desde el punto de penalti, puesto que convirtió 56 goles en 60 lanzamientos desde los once metros, el último de ellos el pasado 8 de octubre ante Vélez.
PROBLEMAS JUDICIALES
Ortigoza anunció su retirada del fútbol apenas una semana después de ser condenado a una pena de dos años y dos meses de prisión no efectiva por "amenazas coactivas" al que fue jefe de seguridad de la plantilla de San Lorenzo en 2015.
El denunciante, Mauricio Argañaraz, aseguró que el 15 de julio de 2015 el jugador lo amenazó en Ituzaingó, provincia de Buenos Aires, por temas económicos particulares no relacionados con la práctica deportiva.
Si bien Ortigoza no tendrá que entrar en prisión, deberá hacerse cargo de los costos procesales y "abstenerse de mantener cualquier tipo de contacto con el denunciante Mauricio Argañaraz y su grupo familiar".