Dos semanas atrás el conjunto de Mikel Arteta tenía en la mano el cuarto puesto de la competición inglesa. Una racha de cuatro victorias seguidas pusieron a los gunners en la parte alta de la tabla solo por detrás del Manchester City, el Liverpool y el Chelsea.
Había alcanzado una situación idónea en el tramo decisivo del curso y dependía de sí mismo para conseguir un objetivo que se le niega desde la temporada 2015-2016.
La clara derrota sufrida en la pasada fecha contra el Tottenham (3-0) encendió las alarmas. Los spurs se situaron a rebufo en la clasificación. Quintos a solo a un punto. El domingo venció al Burnley y dejó al Arsenal sin margen de error.
Se dejó el cuarto puesto en St. James Park el cuadro de Arteta totalmente superado por el Newcastle que afrontó el duelo sin nada en juego pero que dejó sin argumentos a los visitantes.
Mientras pudo, el meta Aaron Ramsdale sostuvo a los gunners pero nada pudo hacer el meta en el minuto 56 cuando una carrera por la izquierda de Joelinton terminó con un centro al área por donde llegó Callum Wilson. Se interpuso el defensa Ben White que mandó el balón a su propia portería.
Lejos de mejorar con los cambios establecidos por el técnico español, como con la entrada del atacante francés Alexander Lacazzette, el Arsenal se descompuso. Atacó sin orden y dejó al aire su defensa, con solo tres jugadores, que no abarcaban la avalancha a la contra de las 'urracas'.
En una de ellas sentenció el partido el conjunto local que llevaba dos partidos seguidos perdidos. Pero ante el Liverpool y frente el Manchester City. Cerró la victoria en el 85 con el gol de Bruno Guimaraes que recogió un rechace del portero a un tiro de Wilson para enviar la pelota a la red.
Disfruta el conjunto de Eddie Howe del momento que vive. Juega sin presión acomodado en el ecuador de la tabla. Desde hace meses sin la zozobra del inicio de temporada, cuando era un fijo en los puestos de descenso. La llegada de los nuevos propietarios han reactivado al Newcastle al que le espera un futuro prometedor si prosigue con la inversión iniciada.
El Arsenal ya no depende de sí mismo. Quinto ahora en la clasificación necesita un fallo del Tottenham en la última jornada. El cuadro de Arteta, con dos puntos por detrás, se enfrenta al Everton que se juega la salvación. El Tottenham se mide al colista ya descendido, el Norwich.